El corazón del pueblo está enriquecido por la majestuosa Iglesia Madre, que alberga un valioso órgano de tubos que data de 1600, testigo de siglos de devoción y arte sacro. Los pintorescos rincones del casco antiguo encantan a los visitantes con sus calles tortuosas, las fachadas de las antiguas casas y los balcones florecidos.
Al pie del pueblo se encuentra una fuente termal de acceso libre, un recurso natural que desde hace siglos ofrece alivio y bienestar a los residentes y viajeros cansados. A solo 1 km del centro urbano se extiende un área de picnic equipada, completa con parque infantil, campo de fútbol y zonas de barbacoa, un lugar ideal para pasar momentos agradables al aire libre. Esta zona es también el punto de partida perfecto para excursiones y senderismo para descubrir los paisajes circundantes.
A dos kilómetros del pueblo se alzan majestuosos acantilados que cuentan con cientos de rutas para los entusiastas de la escalada, ofreciendo desafíos emocionantes y vistas impresionantes. Además, el pueblo está atravesado por la Via dei Camminatori "Vie Francigene di Sicilia", un camino que conecta antiguos pueblos y lugares de interés a lo largo de Sicilia, ofreciendo a los viajeros una oportunidad única de explorar la región a pie, inmersos en su historia y belleza natural.
Además, en los alrededores de la estructura, hay numerosas empresas agroalimentarias que ofrecen recorridos de degustación, permitiendo a los visitantes sumergirse por completo en la cultura culinaria.